La ciencia parece bastante unánime en este caso: los conductores de automóviles caros son lo peor.
Un nuevo estudio descubrió que los conductores de vehículos llamativos tienen menos probabilidades de detenerse y permitir que los peatones crucen la vía: la probabilidad de que disminuyan la velocidad cae 3% por cada 1.000 dólares adicionales en el valor del auto.
Investigadores de la Universidad de Nevada, Las Vegas, especularon que los propietarios de automóviles caros “sentían una sensación de superioridad sobre otros usuarios de la carretera” y eran menos capaces de empatizar con los peatones.
Llegaron a esta conclusión después de pedirles a voluntarios que cruzaran la acera cientos de veces, filmando y analizando las respuestas de los conductores.
Los investigadores utilizaron un hombre blanco y otro negro, y una mujer blanca y otra negra, y también descubrieron que los automóviles tenían más probabilidades de ceder el paso a los participantes blancos y femeninos. Los vehículos se detuvieron el 31% del tiempo tanto para las mujeres como para los participantes blancos, en comparación con el 24% del tiempo para los hombres y el 25% del tiempo para los voluntarios negros.
Pero la mejor forma de predecir si un automóvil se detendría era su costo, descubrieron los investigadores. “La desconexión y una menor capacidad para interpretar los pensamientos y sentimientos de los demás junto con sentimientos de privilegio y narcisismo pueden conducir a una falta de empatía por los peatones” entre los propietarios de automóviles costosos, teorizaron en el estudio.
Y el descubrimiento de una correlación entre el valor del automóvil y el comportamiento brusco no es nuevo; la investigación, publicada en el Journal of Transport and Health, respaldó un estudio finlandés publicado el mes pasado que encontró que los hombres que poseen vehículos llamativos tienen más probabilidades de ser “discutidores, tercos, desagradables y poco comprensivos”.
De acuerdo con esa encuesta de 1.892 conductores realizada por la Universidad de Helsinki, aquellos que se consideran que tienen rasgos de carácter más desagradables estaban “más atraídos por los autos de alto estatus”.
Pero también descubrió que las personas concienzudas a menudo prefieren los vehículos de mayor precio. Si estás leyendo esto mientras estás atrapado en el tráfico de tu nuevo BMW: sí, definitivamente estás en esa categoría.
“Me había dado cuenta de que los que tenían más probabilidades de pasar una luz roja, no dar paso a los peatones y, en general, conducir imprudentemente y demasiado rápido, a menudo eran los que conducían automóviles alemanes rápidos”, dijo en un comunicado de prensa Jan-Erik Lönnqvist de la Universidad de Helsinki.
Se propuso descubrir qué tipo de persona tiene más probabilidades de comprar un automóvil costoso, creando una prueba de personalidad de los propietarios de automóviles finlandeses.
“Las respuestas fueron inequívocas: los hombres egocéntricos que son discutidores, tercos, desagradables y poco comprensivos son mucho más propensos a poseer un automóvil de alto estatus como un Audi, BMW o Mercedes”, dice el comunicado de prensa.
“Estos rasgos de personalidad explican el deseo de poseer productos de alto estatus, y los mismos rasgos también explican por qué esas personas infringen las normas de tránsito con más frecuencia que otras”, agregó Lönnqvist.
Su estudio citó investigaciones previas que indicaron que los conductores al volante de un vehículo costoso tienen más probabilidades de ignorar las regulaciones de tránsito o conducir imprudentemente.
Pero también descubrió que las personas con carácter “concienzudo” también buscan modelos caros.
“Las personas con este tipo de personalidad son, por regla general, respetables, ambiciosas, confiables y bien organizadas”, dijo el comunicado. “Se cuidan a sí mismos y a su salud y, a menudo, se desempeñan bien en el trabajo”.
*Con información de CNN