El marinero Kyle Mullen murió el viernes en un hospital del área de San Diego después de que él y otro cadete SEAL reportaron síntomas de un padecimiento desconocido, informó la Armada.
El otro marino, cuyo nombre no se ha dado a conocer
Permanecía hospitalizado en condición estable, reportó el domingo el diario San Diego Union-Tribune.
La causa de muerte se desconoce y está siendo investigada. Ambos hombres enfermaron apenas horas después de completar con éxito la prueba que culmina la primera fase de evaluación y selección para la clase de élite Demolición Básica Submarina/SEAL (BUD/S).
La Armada indicó que ninguno de los dos experimentó un accidente ni incidentes inusuales durante la Semana del Infierno, que dura cinco días y medio.
El contraalmirante H.W. Howard III, al frente del Comando de Guerra Especial Naval en Coronado, California, expresó sus condolencias a la familia de Mullen en un comunicado.
“Estamos extendiendo todas las formas de apoyo que podemos a la familia Mullen y a los compañeros de clase de Kyle en BUD/S”, señaló Howard.
Mullen ingresó a la Armada en marzo de 2021
Según su biografía allí. En julio se reportó al entrenamiento de los SEAL en Coronado, indicó el Union-Tribune.
La prueba de la Semana del Infierno forma parte de la clase BUD/S, que implica demolición básica submarina, supervivencia y otras tácticas de combate. Se lleva a cabo en la cuarta semana de evaluación de candidatos para los SEAL, en la que aspiran a ser seleccionados para ser entrenados en el Comando de Entrenamiento Básico de Guerra Especial Naval.
El programa SEAL pone a prueba la fortaleza física y psicológica, así como la capacidad en el agua y las habilidades de liderazgo. Es tan extenuante que entre el 50% y el 60% de los aspirantes no logran salir airosos de la Semana del Infierno, en la que a los candidatos se les exige llegar al límite de sus fuerzas.
Fuente: VOA