La temporada de lluvias en Guatemala ha causado estragos, con al menos 357 incidentes que han afectado a unas 54.000 personas, según el último informe de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Riesgo, CONRED.
Derivado de estos incidentes se han registrado cinco deslizamientos, dos en Baja Verapaz, uno en Chimaltenango, uno en Huehuetenango, en Jalapa, cuatro derrumbes, ocho inundaciones.
Pero qué debemos entender como deslizamiento de tierra, especialmente cuando se trata de áreas montañosas y donde el ramaje de carreteras conecta con puntos estratégicos comerciales de comunicación a diferentes poblaciones.
Se considera que puede existir un tema preventivo o diagnóstico para comprender que un lugar es vulnerable a desprendimientos según la topografía de las regiones.
En lo que va de temporada, ya suman más de 20 personas muertas y ha sido necesaria la evacuación de más de 200 en las comunidades por temas de deslizamientos e inundaciones, principalmente en el departamento de Jalapa.
Estos hechos han generado que existan características particulares que podrían llamar la atención.
Los desastres naturales han dejado un total de 672 albergadas y 23 personas fallecidas, personas en riesgo 1,821 y personas afectadas en distintas comunidades 1,182,024, viviendas en riesgo 548, escuelas afectadas 121, personas desaparecidas 3 y personas evacuadas 4,982, según el recuento de las autoridades.
