El colosal monumento de estilo neoclásico cuya construcción culminó a mediados de 1922, con una ceremonia por todo lo alto el 30 de mayo de 1922, se ha convertido en un referente de los hechos históricos de Estados Unidos, que han tenido un eco desde las escalinatas que conforman el conjunto arquitectónico.
Los hechos históricos registrados en este memorial no tienen comparación con otros sitios del país durante el siglo XX y lo que ha trascurrido del siglo XXI, cuando cumple el primer centenario.
Desde “este templo” la cantante afroamaricana Marion Anderson cantó en la primavera de 1939 -al tener vetados los teatros debido al color de piel- con más de 75.000 espectadores; y desde esas mismas escalinatas el líder del movimiento por los Derechos Civiles, Martin Luther King Jr. le dijo a la nación y al mundo I have a dream (tengo un sueño), durante su memorable discurso que sigue inspirando a las nuevas generaciones.
Ahí también se concentraron las marchas multitudinarias de madres que pedían fin a la guerra de Vietnam en la década de 1970 con lisiados que mostraban las secuelas del conflicto de Estados Unidos en el país asiático.
Las dimensiones de este memorial
La ubicación, la solemnidad que acoge y los textos grabados en piedra dan fe de la importancia de esta pieza erigida para honrar al presidente Abraham Lincoln (1809–1865), quien gobernó la nación durante la Guerra Civil de Estados Unidos entre 1861 y 1865.
El centro del memorial es la pieza esculpida en mármol extraído de una cantera en el Estado de Georgia, la que estuvo a cargo del escultor estadounidense Daniel Chester French (1850–1931).
La pieza mide más de 9 metros de alto, en talla de cuerpo entero del presidente Lincoln, número 16 en línea sucesoria, considerado como un padre de la nación a pesar de haber gobernado el país casi un siglo después de la Independencia de Estados Unidos firmada el 4 de julio de 1776.
El presidente Lincoln preservó la unión americana ante la fuerza separatista de los estados del sur, promulgó la Emancipación de los esclavos en Estados Unidos al terminar la guerra, y pereció por un magnicidio al inicio de su segundo mandato, hechos que dimensionan su figura en la historia de la nación.
El memorial de Lincoln
Ha estado enlazado a la resistencia y la solidaridad contra la violencia hacia minorías como los afroamericanos durante la segregación racial.
Pero también los ecos han llegado hasta el presente, con temas actuales, en el verano de 2020, la muerte del George Floyd, sometido y asesinado por policías blancos en la ciudad de Minneapolis, en el estado Minnesota, desató una hola de protestas contra la discriminación que dio paso al movimiento Black Lives Matter (las vidas de negros importan) y este espacio público en la capital estadounidense volvió a concentrar manifestaciones masivas.
La violencia registrada en otras ciudades, a la vez que más personas de color morían a manos de policías y mientras se difundidos los hechos en redes sociales en tiempo real, las manifestaciones de violencia no llegaron a los nomumentos nacionales de la capital, con seguridad reforzada con la Guardia Nacional, el Memorial de Lincoln se mantuvo como simbolo de resistencia y no fue vandalizado.
El Servicio de Parques Nacionales que administra este recinto memorial que pertenece al gobierno federal ha considerado en este centenario que la figura de Lincoln es inspiración para el futuro y destaca la luz de la figura del expresidente para las generaciones venideras.
Fuente: VOA