La operación “London Bridge” o “Puente de Londres” es el nombre clave que se le asignó al plan que se efectuará durante los días y semanas posteriores al fallecimiento de la Reina Isabel II.
El llevar a cabo este plan traerá consigo mismo muchos cambios que tendrán impacto tanto en el Reino Unido, como en el resto del mundo. Luego del fallecimiento de la monarca, se espera que la primera ministra Liz Truss ponga en marcha la operación “London Bridge”. El primer paso consiste en que los 15 gobiernos que se encuentran fuera del territorio del Reino Unido dónde la reina ejerce como jefe de estado, serán informados del acontecimiento. Luego ese anuncio se trasladará hacia los 36 países que forman parte de la Mancomunidad Británica de Naciones y otros líderes alrededor del planeta.
Posterior a esto, las puertas del Palacio de Buckingham se iluminarán de color negro en honor al fallecimiento de la reina. En ese mismo momento se alertará a los diversos medios de comunicación a nivel mundial sobre la noticia. Cada medio preparará sus contenidos. Además, cada radio en el Reino Unido encenderá una señal que les informará sobre la noticia de alto impacto a nivel nacional. A eso se le suma que todos los programas de la BBC se van a detener y comenzarán a transmitir un contenido informativo especial. Los presentadores de la BBC se cambiarán de atuendos a unos de color negro para rendir luto ante el hecho. Las plataformas de la cadena de medios cambiarán su distintivo color rojo por el negro.
Los medios de comunicación empezarán a difundir toda la información en torno a la noticia y el impacto que genera en los siguientes días. En el mismo día del fallecimiento de Isabel II, se nombrará a Carlos príncipe de Gales, como el nuevo rey. Además, se informará que tanto la bolsa de valores, como las empresas y comercios que se encuentran por todo el Reino Unido, cerrarán en señal de respeto.
Día después del fallecimiento
El día después del deceso, el rey Carlos III brindará su primer discurso como monarca del Reino Unido. Y el gobierno mediante 41 cañonazos que se efectuarán en Hyde Park Londres, le jurará lealtad a su majestad. Luego de esto, el rey dará una gira por todos los territorios que abarcan el Reino Unido, visitando a los líderes de cada gobierno en las capitales de cada uno de los países. Durante este período todos los canales de televisión tendrán la orden de emitir los diversos documentales que existen sobre la vida de la reina Isabel II. Y la BBC no publicará ningún contenido de carácter cómico como una señal de respeto hasta que el acto funerario haya concluido.
4 días después de la muerte de la reina Isabel II, su ataúd será llevado en una procesión acompañada por las fuerzas militares, la cuál saldrá desde el Palacio de Buckingham y concluirá en el edificio de Westminster Hall. Es aquí donde su ataúd será custodiado durante 4 días para que tanto el rey Carlos III como sus familiares lleguen a presentar sus condolencias y respetos. Luego se abrirán las puertas a todas las personas que estén haciendo fila fuera de la edificio.
El Funeral
Este acontecimiento se estima que se desarrollará entre 10 a 12 días posteriores al fallecimiento de Isabel II. Además, se declarará ese día como jornada festiva oficial para todo el Reino Unido.
La bolsa de valores volverá a cerrar durante el día, así como muchos comercios alrededor del país. A las 11:00 horas en punto, el famoso reloj de Londres, el Big Ben hará sonar sus campanas, la nación guardará unos minutos en silencio hasta que el cuerpo sea llevado a la Abadía de Westminster. En esta iglesia se encontrarán un promedio de 2000 invitados especiales que asistirán a rendir oraciones y homenajes a la monarca. Luego del servicio, el cuerpo será trasladado al Castillos de Windsor y posteriormente a la Capilla de San Jorge para ser enterrada junto a la tumba de su padre el monarca Jorge VI.
Posterior al funeral
Pasado un tiempo del funeral se celebrará la coronación del Rey Carlos III, la cuál se desarrollará en un día festivo. Teniendo en cuenta todos los días festivos, los gastos funerarios y las celebraciones por la coronación del nuevo soberano, se estima que los gastos por el fallecimiento de la reina Isabel II asciendan a miles de millones de libras esterlinas.
Otros cambios en el Reino Unido
Tras la muerte de la soberana, entre los cambios que se implementarán en el Reino Unido destacan: La impresión de una nueva moneda británica con el retrato del rey Carlos III, y el retiro de los billetes actuales que contemplan el rostro de la reina. Otros documentos como pasaportes, sellos, uniformes de la policía y de los militares, deberán ser sustituidos de igual manera. El himno nacional cambiará su famosa frase “Dios salve a la Reina” por “Dios salve al Rey”. Además de los múltiples cambios políticos, culturales y de otras índoles que sucederán dentro y fuera del Reino Unido.