Luego que se confirmara el cierre en Guatemala de las operaciones de explotación petrolera de la empresa franco-británica Perenco, se han conocido algunas cifras de los resultados de la compañía para la economía nacional y local; además en el medio ambiente.
Programada para agosto de 2025, el cese de las labores de Perenco fue confirmado durante entrevista en ALas845 por el ministro de Energía y Minas, Víctor Hugo Ventura, como una de las primeras acciones del Gobierno de Bernardo Arévalo en su política energética.
En el espacio de análisis de ALas845, Ventura indicó que a la decisión de no renovar la concesión a Perenco le seguirá “un cierre programado que permitirá asegurar que se entreguen las instalaciones” y que al mismo tiempo se haga de acuerdo al cumplimiento de mediación de daños ambientales y al fortalecimiento de instituciones como el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap) y de la cartera de Energía y Minas.
Desde su instalación en el país, en 2001, la empresa ha estado rodeada de señalamientos y sobre todo de críticas de ser un mal negocio para el Estado de Guatemala al no otorgar los réditos esperados.
En contraste, una de las cifras que resaltan en informaciones de agencias de noticias, es la que refiere que Perenco ha otorgado al Estado al menos Q13 millardos en regalías e impuestos, corriendo por parte de la empresa todos los gastos de la operación petrolera.
Según las informaciones, esto significa que Perenco se erige entre los principales contribuyentes en la historia del país.
En un plano más micro o local, se asegura que desde su estadía en Guatemala en 2001, la empresa ha aportado por lo menos Q350 millones a comunidades de Petén e Izabal, en varias iniciativas de ayuda. Programas aún activos en las comunidades en las áreas de salud, educación, nutrición y medio ambiente, entre otros.
Los datos brindados por las agencias de prensa, dan cuenta que desde 2001 alcaldías de todo el país han recibido los aportes de Perenco; destacando la municipalidad de Petén, que ha recibido el resarcimiento por la explotación petrolera, basado en la ley que estableció el Fondo para el Desarrollo Económico de la Nación (Fonpetrol).
En contraposición a los señalamientos de daños al medio ambiente, las informaciones de medios de información detallan que desde 2010 la compañía ha otorgado recursos monetarios al Conap para recuperar áreas degradadas en la biosfera maya.
