Por la pandemia del COVID-19 se demostró que varios guatemaltecos sufrieron daños psicológicos por el confinamiento y por discriminación de personas que estuvieron contagiadas por el COVID-19.
La pandemia causada por el COVID-19 ha propiciado cambios en los hábitos y conductas sociales, en la manera de interactuar, en el estilo de vida de las personas y también ha provocado consecuencias psicológicas en la población a nivel mundial.
Y en Guatemala no ha sido la excepción. Derivado de una serie de confinamientos e incertidumbre por contagios y muertes, se ha identificado consecuencias psicológicas.
Buscamos la opinión de un experto, Mario Hernández es Psicólogo clínico y esto nos indica…
A criterio de Hernández a muchas personas les afecta el encierro ya que no se ha creado una rutina, incluso hasta han sobrepasado el uso de las redes sociales y esto llegó hasta aburrir a varios adolescentes.
La decisión de tener un confinamiento se dio en consenso con varias autoridades del Gobierno de Guatemala, pero a decir del experto en Salud Mental, los altos mandos no tomaron en cuenta la repercusión que podría haber en las personas psicológicamente.
Otro de los daños psicológicos que vino a dañar los Guatemaltecos fue la discriminación a las personas que dieron positivo a COVID-19, esta situación que hasta la fecha se sigue dando
Una de las recomendaciones es buscar ayuda a través de los expertos en salud, sin embargo, lo importante es pedir ayuda para evitar que esto incremente y llegue a casos extremos como suicidios.
La iniciativa llamada “Hope & Help, se vale pedir ayuda” busca concientizar a las personas en buscar apoyo y motivar a las personas con las publicaciones que realizan a través de las redes sociales
En esta página se puede encontrar contenido que puede ayudar a obtener una guía y mejorar la salud mental.