La final de la Champions League se vio perjudicada por incidentes previos al juego cuando los fanáticos afuera del Stade de France en París fueron recibidos por la policía.
Videos en las redes sociales mostraron que los seguidores afuera del estadio se rebelaron después de esperar un período prolongado para intentar ingresar al estadio. Se podía ver a las fuerzas de seguridad local rociando gases lacrimógenos a los fanáticos mientras buscaban mantener el control.
“La gente sin entradas forzó las barreras e intentó entrar al estadio para ver el partido. Estos intentos crearon movimientos de multitudes”, dijo un portavoz de la Prefectura de Policía de París en un comunicado.
El vocero dijo que la policía intervino para frustrar los intentos de ingresar el estadio, repeler a los alborotadores y facilitar el acceso a los espectadores con boletos.
La UEFA se vio obligado a retrasar el partido más de 30 minutos por lo que consideró “razones de seguridad”.
“Estamos muy decepcionados por lo problemas de entrada al estadio y la ruptura del perímetro de seguridad que enfrentaron los fanáticos del Liverpool está noche en el Stade de France” dijo el Liverpool en un comunicado.
“Este es el mejor partido de fútbol europeo y los seguidores no deberían tener que experimentar las escenas que hemos presenciado esta noche. Hemos solicitado oficialmente una investigación sobre las causas de estos problemas inaceptables” finalizó.
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