El presidente de Estados Unidos Joe Biden anunciará este martes nuevos pasos que su administración está tomando para abordar el aumento de los precios de la gasolina en todo el país. Entre estas medidas están incluidas acciones de emergencia para expandir las ventas de biocombustibles, contrarrestando el aumento de los precios de la energía en medio de la invasión rusa de Ucrania.
Durante la conferencia de prensa de este lunes, la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, señaló que suspender la prohibición de venta de combustibles con mezclas más altas de etanol en el verano estaba en “el menú de opciones” que la administración estaba considerando “para garantizar que la oferta en el mercado satisfaga la demanda, por lo tanto, bajando el precio”.
La estrategia conjunta de Biden para bajar los precios de los combustibles
La medida sigue al anuncio de Biden el mes pasado de una liberación histórica de petróleo de las reservas estadounidenses, incluido un millón de barriles por día de la Reserva Estratégica de Petróleo de EE.UU. durante los próximos seis meses. Eso hace parte de un “puente en tiempos de guerra” para aumentar la producción de petróleo a medida que se activan los esfuerzos de Estados Unidos y de las petroleras mundiales después de la pandemia de coronavirus.
“El presidente cree que las acciones de un dictador al otro lado del mundo no deberían afectar lo que las familias pagan en el surtidor aquí en casa”, dijo la Casa Blanca en una hoja informativa anunciando la acción que se compartió con CNN. “Las acciones de hoy también refuerzan el objetivo de la Administración Biden-Harris de lograr una independencia energética real y el compromiso con una estrategia a largo plazo para estimular el desarrollo inteligente y la adopción de combustibles locales sostenibles”.
Aún así, la administración no llega a sancionar las exportaciones de energía rusas y en cambio, el alto funcionamiento señala “un conjunto de acciones que creemos que han generado un impacto severo en la economía rusa”.
