Lilia Paredes, primera dama del Perú, sería la coordinadora de una presunta organización criminal liderada el presidente Pedro Castillo, afirma la investigación preparatoria formalizada este viernes por el Equipo especial de fiscales contra la corrupción del poder.
El documento del Ministerio Público con los argumentos contra la esposa del presidente, sostiene que dicha organización fue creada con el fin de hacer “licitaciones públicas fraudulentas” para quedarse con el dinero de los contratos, y que la primera dama sería una de las coordinadoras del “proyecto criminal”.
Lilia Paredes no enfrenta cargo formal alguno en esta etapa de la investigación.
El presidente Castillo dijo este sábado a medios locales que su esposa está “dispuesta a esclarecer las acusaciones” en su contra y que entregará su pasaporte de forma voluntaria para que no se diga que trata de huir del país.
Un día antes había tuiteado sobre el tema: “Con mentiras de supuesta fuga, se pretende montar una solicitud de impedimento de salida del país contra mi esposa @LiliaParedesN. No se puede fugar aquel que es inocente. Se queda en el Perú porque acá está su familia, sus hijos, sus hermanos, porque no hay nada que temer”.
Y agregó el mandatario: “Lamentamos que ahora los dirigentes sean criticados y perseguidos por levantar su voz reclamando justicia, educación y salud para sus pueblos. Seguiremos trabajando para generar el verdadero cambio para el país. Las mentiras no van a doblegar a este gobierno”.
Abogado de la primera dama: “Los elementos de la investigación son débiles, de escaso valor y confiabilidad”
Benji Espinoza, abogado de la primera dama de Perú, Lilia Paredes, dijo que la investigación preparatoria abierta a su clienta “contiene un conjunto de deficiencias y omisiones que vamos a cuestionar oportunamente a través de un mecanismo. No voy a adelantar todavía cuál será el recurso exacto, pero se va a cuestionar”.
Espinoza agregó que la investigación tiene una duración prevista de 36 meses, durante los cuales la Fiscalía tiene que comprobar sus hipótesis. Es decir, que habría “una red criminal que ha estado direccionando obras y que a partir de eso se han obtenido ganancias ilícitas y se han realizado conductas para lavar el dinero. Nosotros consideramos que la primera dama es absolutamente inocente. Nuestra postura es negar completamente los cargos. Los elementos de convicción sobre los cuales se sostiene la imputación son débiles, de escaso valor y confiabilidad”, dijo Espinoza.
