“Barbie” no se estrenó oficialmente en Rusia, pero eso no ha impedido que la barbiemanía llegue al país

"Barbie", la película taquillera de este verano boreal, llegó a Rusia a pesar de no haberse estrenado oficialmente allí debido a la guerra en Ucrania,  y parece que la barbiemanía ha encandilado a muchos rusos incluso cuando la película suscita la condena de las autoridades.

La distribuidora de “Barbie”, Warner Bros., propiedad de la empresa matriz de CNN, Warner Bros. Discovery, fue uno de los estudios occidentales que se retiró de Rusia tras la invasión a gran escala de Ucrania el año pasado. Desde la primavera de 2022, no se ha estrenado en Rusia ni una sola película de la compañía.

El Ministerio de Cultura de Rusia dijo que no ha recibido una solicitud para estrenar “Barbie”, y las autoridades negaron los informes de que un estudio de doblaje había comenzado a trabajar en traducciones rusas para la película, según la agencia estatal de noticias TASS. Cuando CNN se puso en contacto con Warner Bros Discovery, esta no hizo más comentarios al respecto.

Aunque varias cadenas de cines rusas han declarado que no proyectarán “Barbie” sin la debida licencia y se han mantenido alejadas de las copias piratas, algunos cines más pequeños han optado por realizar proyecciones de versiones piratas de menor calidad debido a la gran demanda.

Cerca de 90 personas asistieron a una proyección improvisada de la película en la ciudad siberiana de Tyumen a principios de este mes, según el medio de noticias estatal RIA Novosti. Los organizadores dijeron al medio que habían encontrado una buena versión adaptada con voces en off.

También se han prometido proyecciones similares con doblaje en ruso en varios cines de la capital, Moscú.

La semana pasada se inauguró en Moscú una zona fotográfica llamada “Casa de Barbie”, y algunas marcas rusas de ropa han lanzado colecciones con temática de Barbie rosa.

Las proyecciones en Tyumen se celebraron en el cine al aire libre Gorkiy, según una publicación en las redes sociales rusas.

“Todo el mundo quiere ver “Barbie”, ¿quieres un espectáculo extra? ¡Tranquilos! ¡Y recuerden que esto es una pantalla! Así que los amantes de la calidad 4K y el sonido perfecto deberán esperar al estreno digital en noviembre. Pero hemos encontrado la mejor copia que está en Internet”, dice el mensaje de Gorkiy Cinema.

En algunos de los comentarios que respondían al post, la gente decía que las entradas para las proyecciones estaban “agotadas”, mientras que en otros los espectadores se quejaban de la “terrible calidad imposible de ver” de la copia pirata.

Aunque Estados Unidos, la Unión Europea y sus aliados han impuesto sanciones a bienes y productos desde que comenzó la guerra, algunos productos han llegado a los consumidores rusos a través de países que no han aplicado sanciones contra Moscú. Algunos consumidores rusos han podido comprar productos sancionados viajando a otros países y trayéndolos de vuelta a Rusia.

La barbiemanía también se ha apoderado de las redes sociales, donde numerosas personas influyentes y celebridades rusas publican imágenes y videos relacionados con “Barbie” y destacan sus propios looks con esta temática.

Una influencer de Moscú saludó a sus seguidores con una “Hola, Barbie”, preguntándoles cuál de sus looks les gustaba más. Otra dijo que le hacía ilusión comprarse una camiseta de Barbie, preguntándose quién iba a pensar que “se iba a producir un movimiento Barbie tan feroz”.

“¿Ya has adivinado quién es esta Barbie?”, preguntó otra bloguera rusa, jugando con un sitio web para crear una imagen de sí misma como muñeca Barbie.

Miss Rusia 2023, Zhanna Specialnaya, de 32 años, declaró a principios de este mes al medio de noticias estatal TASS que no se considera una “Barbie”, pero que le gusta la comparación con la muñeca y que tiene mucha ropa rosa.

Barbie es una mala influencia, según las autoridades rusas

A pesar del entusiasmo, varios funcionarios y legisladores rusos han criticado a la icónica muñeca, elaborada por el fabricante de juguetes estadounidense Mattel, y a la película por promover lo que consideran valores occidentales moralmente degradados.

Los comentarios de los medios de comunicación estatales han relacionado la película y la muñeca con la cultura “decadente” y los objetivos geopolíticos de Estados Unidos.

“Y aquí está una rubia de ultramar vagamente familiar desde la infancia, emitiendo juicios sobre el papel de la mujer en nuestro mundo”, escribió el periodista Dmitry Kosyrev en un comentario.

Dijo que incluso cuando Hollywood intentó llegar a los mercados de Asia, “hubo problemas: en el fotograma [de la película], Barbie tenía un mapa de los territorios del Mar de China Meridional  según la versión de Beijing, y la película fue prohibida en Vietman”, dijo. “Lo principal es que esta muñeca resucitada no es interesante para los asiáticos”.

La exespía convertida en legisladora Maria Butina declaró al canal estatal Duma TV que deberían retirarse las imágenes de las muñecas Barbie, porque promueven “el tema LGBTQ”.

“Lo que vemos: gays, transexuales, mujeres que se han apoderado del mundo. No se trata de ninguna unión entre un hombre y una mujer. Nuestra tarea es promover nuestras propias imágenes e ideas. Pero Barbie, junto con Mattel, debe ser retirada, porque están importando el tema LGBTQ a Rusia”, declaró Butina, que actualmente es miembro de la Comisión de Asuntos Internacionales.

Aunque la película ridiculiza en gran medida los estándares corporales de Barbie Land, criticados desde hace tiempo por poco realistas, la postura de Butina encuentra eco en varios funcionarios rusos, que sostienen que tanto la muñeca como la película podrían tener una influencia negativa en las niñas. No está claro si alguno de esos funcionarios ha visto siquiera la película.

“Si se toman las dimensiones de Barbie y se ponen en una persona real, entonces se trata de una cintura de 35 centímetros, es muy difícil imaginar a una niña con una cintura de 35 centímetros”, dijo Tatyana Butskaya, vicepresidenta del Comité para la Familia, la Mujer y la Infancia de la Duma Estatal, en una conferencia de prensa en Moscú sobre la influencia de los juguetes en la psique infantil.

Legisladores de la Duma Estatal, la cámara baja del parlamento, han acusado a Barbie de promover los valores LGBTQ y la anorexia, mientras que un profesor asociado de la Universidad Pedagógica Estatal de Moscú afirmó que las niñas que jugaban con Barbie no quieren dar a luz porque la muñeca ha moldeado su conciencia como símbolo de mujer independiente.

“Curiosamente, Barbie se puso a disposición de los niños en la década de 1990. Las niñas que se criaron jugando con esta muñeca tienen ahora más o menos 30 años. Ahora tienen unos ideales algo diferentes”, declaró la profesora asociada de la Universidad Pedagógica Estatal de Moscú, Tatyana Semenova, según el medio privado ruso National News Service.

“La prioridad no es la familia, sino una carrera, y quizá lo que se estableció en la infancia se está manifestando hoy”.

El partido gobernante en Rusia, Rusia Unida, ha prometido presentar próximamente a la Duma Estatal un proyecto de ley que obligue a comprobar que los juguetes y juegos infantiles cumplen con la “ideología espiritual y moral del país”, declaró este mes al medio ruso  Izvestia Tatyana Butskaya, vicepresidenta primera del Comité de la Duma Estatal para la Familia, la Mujer y la Infancia.

Este es el veredicto oficial. Extraoficialmente, sin embargo, sigue siendo cierto que una película que ha unido a la crítica y al público en el extranjero ha conmovido también a una Rusia aislada.

Mariana Martinez

Mariana Martinez

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