El pasado viernes 9 de septiembre se registro un terremoto de 6,8 grados de magnitud en la nación de Marruecos a las 11:00 p.m. hora local. Tras el movimiento telúrico, el Ministerio de Interior del país africano emitió un discurso por los medios estatales del país. El secretario General de Asuntos Internos de la cartera, Rashid Al-Khalfi, instó a la población instó a “mantener la calma y evitar el pánico”. Además, el secretario dio a conocer que el gobierno había activado todos los recursos para hacer frente a la emergencia nacional. Según el Servicio Geológico de las Estados Unidos (USGS) dio a conocer que se trató del sismo más fuerte que ha afectado esa área en 120 años.
De acuerdo con la entidad, el terremoto fue localizado a 18,5 kilómetros de profundidad, el epicentro se ubicó a 52,6 kilómetros al este de Oukaïmedene que se encuentra en la región de Marrakesh-Safi y a 48,4 kilómetros al noroeste de Marrakesh. Tras la tragedia el medio estatal marroquí Al-Auola mostró una serie de daños ocasionados con el sismo donde se destacaban varios edificios derrumbados. En la ciudad de Marrakesh se pudo observar que múltiples casas se derrumbaron, así mismo se podía visualizar que varias personas juntaban esfuerzos por mover los escombros mientras esperaban la llegada y ayuda de los equipos de rescate. El movimiento telúrico fue tan fuerte que se sintió en Rabat. La capital marroquí se encuentra a unos 350 kilómetros al norte de las montañas de Alto Altas.
Tras suscitarse el sismo, las autoridades anunciaron a la población que se protegiera debido a posibles réplicas. El Ministerio de Interior ha estado actualizando la cifra de fallecidos tras el terremoto. De acuerdo con una de las últimas actualizaciones, se contabilizaban de momento un total de 2,012 persona fallecidas y 2,059 heridas. Además, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, el sismo afectó a unas 300,000 personas que se encuentran en las cercanías de Marrakesh. El gobierno marroquí declaró 3 días de duelo nacional, por lo que las banderas ondearán a media asta. Autoridades reportan que una gran cantidad de personas descansa en el parque de Oliveraie que se encuentra ubicado en el centro de Marrakesh. Así mismo se ha visto que mucha de la población de la ciudad más afectada, se alejó de los edificios del casco histórico de la ciudad por temor a que tanto las casas o edificios que siguen de pie puedan derrumbarse si se producen más temblores.
