La Organización Meteorológica Mundial (OMM) confirmó que los primeros ocho meses de 2024 han sido los más calurosos registrados. Según su secretaria general, Celeste Saulo, el informe “Unidos en la Ciencia”, presentado en la Asamblea General de la ONU, resalta que 2023 fue el año más caluroso y 2024 sigue esa tendencia. Agosto marcó el decimoquinto mes consecutivo con récords de calor, y el verano boreal fue el más cálido de la historia.
Hay un 80 % de probabilidad de que, en los próximos cinco años, la temperatura media del planeta supere temporalmente 1.5 °C sobre los niveles preindustriales, lo que podría desencadenar fenómenos climáticos extremos. Además, incendios forestales, inundaciones y sequías han impactado varias regiones, mientras la extensión del hielo marino global en agosto fue la segunda más baja registrada.
Pese a los datos alarmantes, se destacó el papel crucial de la inteligencia artificial y los sistemas satelitales en mejorar los pronósticos climáticos y la gestión de recursos naturales. Un estudio de Climate Central reveló que el 13 de agosto más de 4,000 millones de personas enfrentaron temperaturas inusualmente altas, mostrando el impacto del cambio climático en 2024. La temperatura media global podría aumentar hasta 3 °C para finales de siglo.