En el diario oficial, se publicó el reglamento sobre la entrega del bono familiar para personas afectadas por la crisis del COVID-19.
Se trata del acuerdo gubernativo 57-2020 del Ministerio de Desarrollo Social (Mides) que contiene las bases para delimitar a la población que tendrá acceso al bono de mil quetzales.
El acuerdo asegura que el bono se entregará a población en riesgo, cuyos fondos se obtendrán de Q6 millardos.
Como se sabe, los beneficiarios serán quienes su consumo de energía eléctrica durante febrero, haya sido menor a 200 kilovatios hora mes.
Y si en caso una familia no tiene servicio de energía, será el INE y otras instituciones que evalúen cada caso.
Prioriza a personas en pobreza, madres solteras, adultos mayores, personas con discapacidad, familias con niñez en desnutrición y enfermos crónicos.
Servidores públicos, quienes tengan contratos administrativos o presten servicios en el Estado y pensionados públicos, quedan afuera de este beneficio.
Sin embargo, cualquiera puede solicitarlo si considera que llena los requisitos, pero no fue incluido. Para ello, deberá llenar un formulario, aunque el acuerdo solo especifica que se realizará en una “plataforma”.
Para la entrega, la Superintendencia de Bancos y otras instituciones deberán crear un instrumento para que los beneficiarios puedan retirar el aporte por medio del sistema bancario.
