Las videconferencias fueron propuestas por el Organismo Judicial para agilizar los procesos detenidos por las medidas de restricción generadas por la pandemia de COVID-19, sin embargo a la fecha se han enfrentado a obstáculos para su avance.
En junio pasado, luego de 3 meses de mantener detenidas las labores de los diferentes juzgados, el Organismo Judicial tomó la decisión de implementar un plan piloto en tres sedes judiciales para realizar audiencias vía videoconferencias, lo cual se amplió a otras judicaturas. En aquel momento algunos jueces aseguraron que dicho sistema les permitió reducir su mora judicial.
Para algunos abogados que asistían a audiencias mediante este sistema también resultó efectivo.
Con el retorno a la normalidad en las sedes judiciales, la demanda de este sistema ha incrementado, según las estimaciones de la cámara penal.
Aunque el sistema fue implementado para agilizar, los jueces ahora se encuentran con una saturación de sedes judiciales que exigen utilizar el sistema, y la falta de personal y espacio para realizar las mismas son un obstáculo.
Otro de los problemas detectados, es que dichos restrasos han provocado que tanto abogados como fiscales no asistan a las audiencias pues ya tienen programados otros procesos que también deben atender.
Por su parte la Cámara Penal asegura que están contratando personal necesario para dar la asistencia necesaria a la judicaturas y evitar un incremento en la mora judicial.
Mientras se espera tener los espacios y el personal adecuado para atender la demanda de videoconferencias, el Organismo Judicial se encuentra licitando una actualización de las licencias del software que soporta este sistema, además de que se tiene prevista la compra de 100 licencias más para extender el sistema a otras judicaturas.
