Una alerta de tormenta tropical se emitió para las costas este y oeste de Florida, incluidos Miami, Sarasota, Key West, West Palm Beach y Melbourne, mientras un potencial ciclón tropical cerca de la península de Yucatán ha sido designado, según el Centro Nacional de Huracanes.
Un potencial ciclón es un término que se usa para describir un desajuste climático que aún no es una depresión o tormenta tropical, pero se pronostica que se convertirá en una y amenazará a tierra firme dentro de las 48 horas.
Los vientos máximos sostenidos son actualmente de 56 km/h y se espera que el sistema se fortalezca a depresión tropical este viernes y probablemente a la tormenta tropical Alex por la tarde o por la noche.
Según la trayectoria del pronóstico actual, el sistema debería moverse a través del sur y centro de Florida este sábado. Las fuertes lluvias y las inundaciones serán la principal amenaza de la tormenta, con un total de precipitaciones de 10 a 20 centímetros, con 30,48 cm de lluvia en la mitad sur del estado y los Cayos. Las alertas de inundaciones ya están vigentes para gran parte del sur de Florida, incluido Miami.
Al emitirse una alerta o advertencia de tormenta tropical, eso significa que existe la probabilidad de que las personas dentro de esas alertas o advertencias experimenten condiciones meteorológicas de tormenta tropical durante los próximos días.
Para que la tormenta sea bautizada como Alex, el primer nombre de la temporada de huracanes de 2022, el sistema tendrá que fortalecerse y alcanzar vientos sostenidos de 62 km/h o superiores. Es muy posible que este sistema de tormentas siga siendo una depresión tropical y que nunca gane la fuerza del viento para ganarse un nombre.
“Tanto si la tormenta se organiza como si no, es posible que se produzca una inundación importante en el sur de Florida y en los Cayos”, afirma el meteorólogo de CNN Chad Myers. “Es demasiado pronto para decir dónde serán las lluvias más intensas porque aún no es una tormenta, pero los modelos indican que es posible que se reciban de 304 a 406 mm de lluvia en las zonas más afectadas”.
“Todavía hay cierta variabilidad en la forma en que este sistema seguirá, pero son ciertamente plausibles las fuertes precipitaciones capaces de dispersar a numerosas inundaciones repentinas a través del sur de Florida y en los Cayos”, dijo el Centro de Predicción del Tiempo (WPC, por sus siglas en inglés) este jueves por la mañana.
Pronostican un riesgo moderado, nivel 3 de 4, de precipitaciones excesivas, que podrían provocar inundaciones repentinas.
La humedad tropical profunda surgirá por delante de la probable tormenta y sobre el sur de Florida a lo largo del viernes y hasta el sábado.
Es muy probable que el sur de Florida esté en la trayectoria
Los modelos computarizados de previsión empiezan a coincidir en que se formará una tormenta o depresión tropical que afectará al sur de Florida.
“Los últimos modelos de orientación están empezando a coincidir en que esta baja pasará en algún lugar sobre la parte sur de la península de Florida durante el día del sábado”, dijo el Servicio Meteorológico Nacional en Miami el jueves por la mañana.
La trayectoria es importante porque si toma una ruta más al sur, esto podría mantener las áreas densamente pobladas del sur de la Florida fuera de la amenaza severa que viene del lado noreste de las tormentas tropicales y huracanes.
“Los vientos fuertes y uno o dos tornados aislados serán la principal amenaza severa el viernes y hasta el sábado”, dijo el NWS en Miami. “Estos detalles siguen siendo inciertos ya que dependerá del curso exacto que tome el sistema. Una trayectoria más al sur colocaría el cuadrante noreste sobre las aguas, lo que sería un mejor escenario con respecto al clima severo a lo largo del sur de la Florida”.
Por lo tanto, la trayectoria importa, incluso si es solo una tormenta tropical.
Chad Myers advierte que hasta que el NHC localice el centro exacto de esta tormenta, los modelos de previsión tendrán dificultades para predecir con exactitud la trayectoria de esta tormenta.
“Un avión cazador de huracanes se dirige hoy a la zona y se espera que pueda encontrar el verdadero centro de cualquier circulación”, dice Myers.
Esa información se utilizará en las ejecuciones de los modelos computarizados este jueves por la noche, dando una mejor indicación de la trayectoria y la fuerza potencial de la tormenta.
El miércoles por la noche, sin saber la ubicación exacta del centro del sistema de la tormenta, el modelo estadounidense tenía 3 ubicaciones diferentes de baja presión exactamente al mismo tiempo, explica Myers. “Para mí, esto indica que la cortante del viento en la zona puede frenar la organización de la tormenta potencial y, por ahora, impedir que crezca rápidamente”.
Este sistema tiene dos de los tres ingredientes necesarios para formar un huracán
Para que se forme un huracán, se necesita “agua cálida en el océano, baja cortante del viento y un grupo de tormentas preexistentes… ahora mismo tenemos 2 de los 3”, dice Myers.
La cortante del viento es el cambio en la velocidad y dirección del viento a medida que se sube en el cielo. Si es fuerte, como lo es ahora en el Golfo de México, dificulta la formación de huracanes.
“Tenemos muchas fuerzas opuestas aquí”, dice Myers. “Es como intentar acelerar el auto y no darse cuenta de que el freno de emergencia está puesto”.
Si el freno, la cortante del viento, disminuye, existe una pequeña posibilidad de que esta tormenta se intensifique más de lo previsto.
Sin embargo, este es el escenario menos probable.
Otra previsión de temporada de huracanes por encima de la media
La semana pasada, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) publicó su previsión para esta temporada de huracanes.
La administración prevé un año por encima de la media, con entre 14 y 21 tormentas con nombre, entre 6 y 10 huracanes y entre 3 y 6 huracanes importantes, de categoría 3 o superior.
Hay varios factores que contribuyen a que la temporada de huracanes sea “intensa”.
“Estamos en un período activo”, dijo el administrador de la NOAA, Rick Spinrad. “Hay ciertos ingredientes que impulsan la intensidad y la frecuencia de los huracanes”.
Uno de ellos son las condiciones del fenómeno meteorológico conocido como La Niña existentes en el Pacífico ecuatorial.
Este fenómeno crea temperaturas oceánicas más frías que la media alrededor del ecuador en el Pacífico y provoca impactos meteorológicos en todo el mundo.
La Niña presenta condiciones favorables para los huracanes en el Atlántico, en contraste con las de El Niño.
Esta mañana, la Universidad Estatal de Colorado (CSU, por sus siglas en inglés) actualizó sus previsiones. Ahora prevé una temporada de huracanes muy superior, con 20 tormentas con nombre, 10 huracanes y 5 huracanes importantes.
Este es el número más alto de tormentas con nombre que la CSU ha pronosticado para la temporada en junio, dijo Phil Klotzbach, autor del pronóstico. En 2020, el centro de previsión de la universidad predijo 19 tormentas durante su publicación de junio, pero ese número incluía tres tormentas que fueron nombradas antes de que comenzara la temporada.
Este año, todavía no se ha formado ninguna tormenta.
