La Policía del condado de Suffolk, al este de Long Island, donde se produjeron tres de los ataques, aumentó las patrullas en las playas y utiliza drones para revisar el agua en busca de posibles amenazas, según informó este martes la agencia.
La oleada de mordeduras ha puesto en alerta máxima a los bañistas neoyorquinos y recuerda una serie similar de ataques no mortales de tiburones el verano pasado, que provocó el cierre de varias playas.
El martes por la mañana, un dron avistó un banco de unos 50 tiburones cerca de la playa Robert Moses, el mismo día en que una chica de 15 años sufrió mordida mientras nadaba en esa playa, según George Gorman, director regional de Long Island de Parques, Recreación y Conservación Histórica del Estado de Nueva York.
Aunque ni la chica ni nadie cercano vio tiburones en el momento del incidente, lo más probable es que la mordedura fuera de este animal, dijo Gorman.
También el martes, un chico de 15 años sufrió una mordida en un pie de un tiburón mientras practicaba surf en la playa de Kismet, en Fire Island, según informó la policía de Suffolk.
Las heridas de los adolescentes no ponen en peligro su vida, según las autoridades.
Otras tres personas fueron mordidas el martes, entre ellas un hombre de 47 años que nadaba con el agua hasta el pecho en la playa de Quogue Village, en Long Island, según la policía local. La mordedura le causó laceraciones en la rodilla y fue causada por un “animal marino de mayor tamaño”, que se cree que es un tiburón, indicó el Departamento de Policía de Quogue Village.
Las otras dos personas, un hombre de 49 años en Pines Beach y una mujer al oeste de Cherry Grove, sufrieron heridas no letales, según la Policía.
El departamento anima a los visitantes a seguir disfrutando de la playa, pero los insta a estar atentos a los tiburones o grupos de peces que puedan atraer a los depredadores.
La Oficina de Parques, Recreación y Conservación Histórica de Nueva York también ha incrementado su vigilancia en el agua durante el último año, dijo Gorman.
“Tenemos una gran vigilancia, drones y socorristas que escanean y vigilan las playas”, dijo Gorman.
Gavin Naylor, director del Programa de Florida para la Investigación de Tiburones, dijo a CNN “This Morning” que hay precauciones que los bañistas pueden tomar para disfrutar de la playa con seguridad y evitar ataques.
“La gente debería nadar siempre en grupo. No deben nadar demasiado lejos de la orilla, y deben evitar especialmente los peces de cebo”, dijo Naylor.
Aunque vuelvan a ser noticia este verano, el riesgo de ser atacado por tiburones sigue siendo bajo.
El Museo de Historia Natural de Florida documentó 57 ataques confirmados y no provocados en todo el mundo el año pasado. De ellos, 41 se produjeron en Estados Unidos, con ocho incidentes no mortales en Nueva York.
