La crisis que atraviesa el país fue objeto de análisis en el espacio de ALas845 del domingo. En esa ocasión se abordó la visita de la OEA para mediar por bloqueos y manifestaciones.
Los invitados fueron, Luis Fernando Andrade Exembajador; Rodrigo Montúfar, experto en relaciones internacionales; y Roberto Wagner, también experto en relaciones internacionales.
Wagner criticó la petición del Gobierno como una maniobra para salir bien librado ante la crisis.
“La OEA interviene a pedido. Nos encontramos en una situación bien atípica que el Consejo de la OEA ha discutido varias veces la situación de Guatemala. No se sabe si tomará una decisión fuerte, en el momento en que considere que se está dando una interrupción del proceso democrático. La solicitud del gobierno es más para lavarse la cara”, dijo.
Montúfar en una visión más social, indicó que esta crisis es una consecuencia de muchos sin atender las demandas de grupos de la población.
“Al momento parece que hay una unión entre esa masa social desorganizada que no ha sido atendida y los sectores organizados. Se necesita un poder de convocatoria grande para sentarse a la mesa en el diálogo. Hay un caos en la que no puede responder esta masa social, en la que se ha confundido manifestantes con crimen organizado, pues hay gente que se aprovecha de los guatemaltecos para dejarlos pasar. La historia le está pasando la factura a Guatemala”, indicó.
Por su lado, Andrade subrayó que se necesitan liderazgos para solventar la crisis que indica presenta una oportunidad, pues ya es de todo el país.
“La parte positiva es que ya es una crisis nacional. A nadie le conviene la confrontación, solo a los extremos. Está provocado no por los manifestantes, sino por un régimen de imposición. El Estado está al servicio del control. Confiamos en las elecciones pero la burla a la población ha sido descarada. No hay una certeza de la entrega del poder. La elección de Semilla sorprende, y es de defender la democracia, no necesariamente al partido. Estamos al borde de una crisis profunda en Guatemala. El Gobierno no tiene autoridad moral para convocar a un diálogo”, explicó.
Wagner fue más contundente y llamó al binomio electo a ejercer su liderazgo para salir del caos que vive el país.
“La politiquería barata nos está pasando factura. Al partido que ganó es un llamado histórico. Se dice que es una segunda primavera, pero deben estar a la altura. Toca sentarse con gente a la que tal vez se ha criticado, pero toca ser maduro. Si no estamos a la altura de esto, mejor levantemos la mano. Es algo que debemos solucionar los guatemaltecos”, adujo.